Raxo o Cerdo a la Gallega
En otro día, en nuestro restaurante gallego de referencia pedimos Raxo y nos pareció algo digno de hacer. Viendo recetas en Internet, vimos que era antiguamente una forma de aprovechar partes del cerdo buenas pero de duración escasa como el lomo fresco.
Nos hemos puesto manos a la obra y la verdad es que el resultado es más que satisfactorio.
Ingredientes
Preparamos un adobo usando aceite de oliva, pimentón (dulce y picante), sal gorda, hierbas aromáticas (orégano, tomillo, perejil)
Una vez frita la carne añadimos el adobo y cocinamos un poco y volvemos a añadir la carne. Nosotros hicimos dos tandas de carne (por el tamaño de la sartén y la cantidad de carne) y luego volvimos a sacarla para añadir un poco de harina para espesar un poco y luego volvimos a echar la carne.
El resultado, listo para llevar. Merece la pena. No pica tanto como el que probamos, la próxima vez le hecho un poco de guindilla esa con mala idea.
Nos hemos puesto manos a la obra y la verdad es que el resultado es más que satisfactorio.
Ingredientes
- 1Kg de lomo fresco de cerdo sin adobar cortado en filetes gruesos (2 cm o más)
- Ajo en láminas
- Pimentones (dulce y picante)
- Aceite de oliva
- Orégano, Tomillo, Perejil, Sal
El día antes hicimos de los filetes unos tacos más o menos cuadrados quitando la grasa (ya tiene bastante el conjunto).
Preparamos un adobo usando aceite de oliva, pimentón (dulce y picante), sal gorda, hierbas aromáticas (orégano, tomillo, perejil)
Mezclamos bien la carne con el adobo y tapamos con plástico no dejando aire y a la nevera.
Al día siguiente escurrimos en la medida que podemos la carne y el adobo y freímos en aceite la carne. Lo que buscamos es dorar la carne para luego volver a cocinar con el adobo (puedes ver que en paralelo estamos preparando el pisto que está también documentado en otra entrada del blog y que tanto éxito está teniendo :) )
Una vez frita la carne añadimos el adobo y cocinamos un poco y volvemos a añadir la carne. Nosotros hicimos dos tandas de carne (por el tamaño de la sartén y la cantidad de carne) y luego volvimos a sacarla para añadir un poco de harina para espesar un poco y luego volvimos a echar la carne.
El resultado, listo para llevar. Merece la pena. No pica tanto como el que probamos, la próxima vez le hecho un poco de guindilla esa con mala idea.
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