Albóndigas de arroz y gambas

Hacer albóndigas lleva mucho trabajo pero el resultado es muy bueno y en esta ocasión, más.


Ingredientes
  • Para las albóndigas
    • Gambas
    • Pescado blanco, nosotros hemos usado Tilapia que está muy buena
    • Arroz
  • Para la salsa
    • Cebolla, un ajo
    • Un poco de tomate y carne de pimiento choricero (si tienes)
    • Un poco de vino blanco
    • Un poco de harina
    • Un poco de caldo de pescado
Empezamos preparando las albóndigas, para ello ponemos a cocer una tacita de arroz con el método clásico, un poco de aceite en un cazo, unas láminas finas de ajo, calentamos  y cuando está dorado el ajo rehogamos el arroz, añadimos agua (esta vez casi tres medidas de agua porque últimamente el arroz se me quedaba duro), una pizca de sal y ahí 20 minutos.
Mientras, el pescado lo cortamos en trozos pequeños, lo sellamos en aceite y empezamos a desmenuzarlo. Después, las gambas a las que en un poco de aceite echamos unas láminas de ajo y sofreímos bien. Les he añadido un poco de pimentón y una pizca de sal. Terminadas de hacer, las picamos junto al pescado haciendo una especie de pasta que complementaremos con el arroz una vez que esté hecho y enfriado para poder manejarlo. Nosotros no lo hemos hecho pero seguro que perejil fresco picado le dará un toque (el problema del invierno y el huerto de aromáticas).

Ahora hay que hacer las albóndigas. Se nos ha ocurrido coger una cuchara de las de helados y han quedado unas albóndigas King Size pero uniformes. Las pasamos por harina y cuando están todas las freímos en abundante aceite.

Para preparar la salsa, en esa misma sartén, quitamos prácticamente todo el aceite y añadimos cebolla picada y hemos usado un ajo negro (porque tenemos y aunque es cierto que le da un carácter diferente, no nos vamos a volver locos si no los tenemos). Añadimos un poco de harina que cocinamos y echamos un buen chorro de vino blanco, dejamos que evapore el alcohol removiendo todo. Ahora sería el momento de echar el tomate frito y la carne del pimiento (da color, cierto sabor y ayuda a la textura de la salsa), removemos y añadimos caldo de pescado. La idea es que quedase salsa para luego napar las albóndigas por lo que no te quedes corto en el caldo.

Cuando ha cocido un poco volvemos a meter las albóndigas y las dejamos unos minutos (diez por ejemplo) volteándolas con cuidado.

Tardas en hacerlas un poco más de una hora y en menos de diez minutos se las han comido. No compensa :)

Se nos ha ocurrido y posiblemente haremos con la masa de las albóndigas hacer hamburguesas de pescado, la mezcla a la plancha estará fenomenal (Stay tune)


Comentarios

Entradas populares de este blog

Salteado de verduras en reducción de vermouth

Emperador a la cazuela

Codillo caramelizado